El nostre recull

Aquest és el vostres espai! Aquí hi publicarem algunes de les redaccions o textos escrits en qualsevol llengua i assignatura de l'escola. Us convidem a tots a participar-hi!!!

dimarts, 8 de gener del 2013

El otoño era NUESTRO


Todo era más fácil cuando no nos conocíamos, ¿te acuerdas? Todo era mejor cuando simplemente íbamos al cine, nos dábamos la mano y olvidábamos que estábamos viendo una película, y nosotros protagonizábamos la nuestra. No importaba la muchedumbre, no importaban los demás nosotros nos manteníamos firmes. Supongo que entonces éramos felices porqué ni nos conocíamos verdaderamente. Conocer a alguien significa saber sus miedos, sus complejos, sus defectos, sus virtudes, sus secretos, su vida, sus padecimientos. Y realmente, que alguien te conozca perfectamente da miedo. Da miedo porqué si conoces a alguien hasta tal punto, esa persona acabas siendo tú, y digo esto, porque si lo conoces todo sobre esa persona, sabes incluso su forma de pensar, y a cada cosa que le dices, sabrás lo que piensa. Y que sepan lo que piensas, da miedo. Y quizás ahora nos damos cuenta que realmente no nos amábamos, puesto que amar es conocer y respetar, aceptar, confiar y hacer de su imperfección una perfección. Aunque sea imperfecta, pero será una imperfecta perfección, porque solo tú la podrás sentir.
Todo era más fácil cuando en el espacio de nuestra habitación había música aunque estuviésemos callados. Todo era mejor cuando entre abrazo y abrazo, me dabas un beso. El mundo parecía un lugar mejor cuando justo antes de partir susurrabas: "Gracias por existir". Todo era más fácil cuando tus ojos grises me miraban, brillaban, y me mandaban el mensaje de “Si no fuera por ti estos ojos no tendrían vida”. Es difícil sentir que unos ojos grises son felices, por lo general son apagados, pero los tuyos no. Quizás sería porque sentías que estabas enamorado de mí. No lo sé.
Vivimos en un mundo raro, un mundo distante, tal vez. Arisco, más bien. Un mundo lleno de almas incorpóreas que pasean de un lado otro, un mundo de almas incandescentes que creen haber encontrado el amor, un mundo lleno de almas deshechas, que se han dado cuenta de que el amor es una farsa, un mundo de almas temerosas, que prefieren vivir alejadas del dolor.
Sigo pensando que todo era más fácil cuando tú y yo hacíamos el amor, cuando después de una rabieta venía un “lo siento mucho, ni si quiera imagino que haría sin ti”. Todo era más alegre cuando nos mirábamos de reojo y sonreíamos, todo era más fácil cuando nos decíamos que teníamos que ser fuertes, pasar de los demás, y luchar, porque sabíamos que nosotros podíamos. Todo era más fácil cuando me decías que lo nuestro, duraría para siempre.
El otoño era nuestro, el otoño nos pertenecía, la manera en que caían las hojas de los árboles cuando estábamos juntos, cuando paseábamos por debajo de los castaños, era diferente. El viento frío acariciaba mi piel, y le prometía amor eterno a mi bufanda, el ruido de las castañas asadas saltando golpeaba dulcemente mis orejas, el olor del humeante chocolate caliente de nuestras tazas perfumaba el ambiente de la ciudad y el color de nuestras doradas sombras, pintaba las hojas caídas. 

Irene Alonso
4t ESO A

Cap comentari:

Publica un comentari a l'entrada